Cómo elegir la encimera de cocina, en 5 pasos

La encimera de cocina está en el centro de la vida culinaria y familiar. Sabiamente escogida, hace que cocinar sea una experiencia única. Y es que estas superficies proporcionan bienestar, limpieza y seguridad, al tiempo que elevan el valor estético de su entorno y demuestran —una vez más— que la belleza y la funcionalidad no están reñidas.

Saber cómo elegir la encimera de cocina es más una cuestión más de conocimientos que de oportunidad. Criterios de selección hay muchos: el material, el acabado, el color, el precio, etcétera. Es fácil sentirse abrumado ante la diversidad de opciones disponibles, y además no existen respuestas absolutas: la mejor encimera de cocina para una persona puede no serlo para otra. Por ello, el siguiente paso a paso resolverá las dudas de los compradores más indecisos, ayudándoles a acertar en su compra.

¿Qué encimera para cocina elegir? 5 pasos que debes seguir

Paso 1: seleccionar el material y sus prestaciones

De la piedra natural a las maderas, los metales y los minerales compuestos, los materiales para encimeras abren un mundo de posibilidades. Su elección no debe tomarse a la ligera. Ningún otro aspecto influye más en la resistencia, la estética o la eficiencia energética que el material. Por consiguiente, esta decisión ha de basarse en criterios objetivos, concediendo un cierto margen a la subjetividad, es decir, a los gustos y necesidades específicas del interesado.

Con diferencia, las encimeras de mármol, porcelánico, granito y cuarzo son la opción más popular. Su elegancia, durabilidad y limpieza hacen de estas superficies una opción recomendable. Pese a su resistencia a los impactos y las altas temperaturas, estos materiales están lejos de ser los más económicos, desventaja que comparte con la encimera porcelánica, que por otra parte presenta un acabado más novedoso y vanguardista. 

Los nuevos materiales para encimeras de cocina ganan terreno por momentos, y un claro ejemplo es el cuarzo. Las encimeras de este compuesto de sílice reciben una creciente demanda gracias a su variedad de diseños, alta calidad y resistencia al desgaste, no así al contacto con fuentes de calor directo, un hándicap a considerar.

Por su escasa dureza y mantenimiento exigente, las encimeras de madera sólo pueden justificarse por su sostenibilidad y el precio competitivo. Cualquiera de los materiales citados es higiénico y apto para poder entrar en contacto con alimentos.

Paso 2: decidir la altura de la encimera

Las medidas de una encimera comprenden algo más que el grosor y las dimensiones. La altura se escoge de acuerdo con la estatura de las personas que se servirán de esta superficie. Las molestias de espalda son el ‘precio’ a pagar si subestimamos la importancia de la ergonomía en entornos domésticos.

En general, las encimeras de 90 centímetros de altura son apropiadas para usuarios de 1,50 a 1,70 metros, por ejemplo; en caso de superar los 1,80 o 1,90 m. de estatura, se recomienda apostar por encimeras de 95 a 100 cm. Siendo más precisos, la altura óptima para este tipo de superficies está a unos 10 cm por debajo de la altura del codo.

Respecto al grosor, la mayor parte de las encimeras en venta tienen alrededor de 2 cm. Aunque se comercializan unidades de hasta 10 cm, se aconseja no excederse en esta medida, pues repercutirá en el peso del producto. En el polo opuesto, las superficies de 1.2 cm aprox. tampoco son las más indicadas, por su mayor vulnerabilidad. Con esta información sobre la altura y el grosor idóneos, es fácil decidir qué encimera es mejor para la cocina.

Paso 3: escoger la forma y el acabado

Las dimensiones de la cocina condicionan a veces la forma y el tamaño de la encimera. En estancias rectangulares y espaciosas, las encimeras en ‘L’ son bienvenidas. Esta solución tan estadounidense favorece la movilidad, la ventilación y la luminosidad, evitando los ambientes sobrecargados. Para una cocina cuadrada, en cambio, se recomiendan encimeras en ‘U’, forma que maximiza el aprovechamiento del espacio y la funcionalidad de armarios y otros muebles de almacenaje. Si la habitación es estrecha y limitante, es preferible apostar por una superficie más lineal. Estas consideraciones responden al interrogante de qué encimera elegir.

Otro consejo para elegir encimera de cocina es prestar atención al acabado de los cantos. El corte recto no es el único disponible. También es posible adquirir diseños ingleteados, es decir, con un faldón que transmite una apariencia más pulida y robusta. La terminación de mediacaña, por su parte, incorpora un borde redondeado en su sección superior. Más rectilínea es la estética de los cantos biselados, también usuales en estas superficies.

Paso 4: determinar el color de la encimera

La mayor parte de los materiales se ofrecen en una paleta cromática muy diversa. Cuando se desea elegir encimera para una cocina blanca, el mármol y la porcelánica son opciones altamente recomendables gracias a su capacidad para acentuar la luz y elegancia de la decoración. Por contra, los tonos oscuros hacen que esta superficie cobre protagonismo, subrayando el contraste con los colores más suaves y claros. Las encimeras en azul, verde y otros colores vivos dan un toque personal a la cocina, que gana en vitalidad y frescura si la decoración acompaña.

En cuanto a la textura, son apreciados los estilos pulidos y brillantes, en armonía con las corrientes actuales de decoración. Pero el acabado mate e incluso la aspereza de ciertos materiales en acabado Leather casan a la perfección con las viviendas de estilo rústico, clásico o industrial. Por ejemplo, la natural rugosidad del granito, lejos de suponer una desventaja, aumentan su atractivo para ciertos consumidores, posicionándolo como uno de los tipos de encimeras para cocinas más valorados.

Paso 5: el factor precio

Otro criterio para determinar qué encimera elegir para la cocina es el precio. En función de las dimensiones y materiales, estos productos se comercializan en un rango de precios amplio. Con un presupuesto medio, los modelos de cuarzo, mármol, granito o porcelánica son una inversión inteligente, por sus cualidades, resistencia y vida útil.
En cambio, los presupuestos más ajustados encontrarán más interesantes las encimeras fabricadas en formica, madera o laminado, que destacan entre las más económicas del mercado. Sin embargo, el precio no lo es todo. Por sugerentes que sean las ofertas de temporada, son la calidad y las prestaciones del producto las que tienen la última palabra.